¿Las cosas pequeñas?


Aquí tenéis una lista de "cosas pequeñas" que hacen que la vida valga la pena. Suele circular por ahí por email, así que puede que ya la conozcáis. Si es así, veréis que también he añadido algunas cosas de cosecha propia. Os invito a que añadáis más en los comentarios.


Reírse tan fuerte hasta que te duelan las mandíbulas

Una ducha caliente
Un pellizco a una barra de pan caliente

Ninguno delante de ti en la cola del supermercado


Una mirada especial
Dejarse llevar...


Contar un cuento a un niño y ver que te escucha con la boca abierta


Recibir correo


Dar una vuelta en coche por una calle bonita


Encender la radio justo en el momento que están poniendo tu canción preferida


Quedarse tumbados en la cama escuchando la lluvia
La sonrisa de tus hijos


El perfume de las toallas calientes tendidas al sol


Comerte una tableta de chocolate sin remordimientos


Una llamada a (o de) alguien lejano


Un largo baño de espuma


Una bonita charla


Aprobar un examen


La playa


La montaña


Reírse de uno mismo


Sentir "mariposas en el estómago"


Las llamadas a medianoche que duran horas


Correr debajo de las tormentas de verano


Sujetar una taza de té caliente entre las manos


Reírse sin motivo alguno


Tener a alguien que te dice que eres bonita/o


Los amigos


Escuchar de manera casual a alguien decir algo bonito sobre ti


Verte guap@ cuando te arreglas


Despertarte en medio de la noche y darte cuenta de que aún te quedan algunas horas para dormir


Conocer nuevos amigos o pasar un poco de tiempo con los viejos


Que una canción te ponga "los pelos de punta"


Tener a alguien que juega con tu pelo


Un helado


Tener un bonito sueño



Hacer ese viaje a donde siempre quisiste ir



Una taza de chocolate caliente en un día frío





Los viajes en coche con los amigos





Subirte a un columpio





Que una película sea capaz de emocionarte hasta hacerte llorar





Disfrutar de un buen libro





Envolver los regalos debajo del árbol de Navidad con los olores cercanos de los platos típicos en la cocina





Ganar un desafío





Quedarte en la cama hasta tarde ( si es en compañía mejor)





Esperar el momento en el que sabes que te vas a encontrar con ESA persona





Hacer una tarta





Pasar el tiempo libre con tus mejores amigos





Ver las sonrisas y oír las risas de tus amigos





Tomarte de la mano con alguien a quien quieras





Ver en una revista o la tele un lugar famoso/bonito/ interesante y poder decir " Yo he estado ahí"





Encontrarte por la calle un viejo amigo y descubrir que algunas cosas (buenas o malas) no cambian nunca





Un abrazo





Hacer un regalo a un amigo y luego observar la expresión de su rostro mientras abre el paquete y descubre que contiene el regalo que tanto deseaba





Mirar el amanecer





Un beso por sorpresa





Una juerga de las que no se olvidan





Un día en un parque acuático





Saber que amas y eres amado





Levantarse de la cama por la mañana y agradecer por esto





"Disfruta de las cosas pequeñas de la vida, porque un día mirarás atrás y te darás cuenta de que eran grandes cosas"

El Tiempo



-Creo que ustedes podrían encontrar mejor manera de matar el tiempo -dijo Alicia- que ir proponiendo adivinanzas sin solución.

-Si conocieras al Tiempo tan bien como lo conozco yo -dijo el Sombrerero-, no hablarías de matarlo. ¡El Tiempo es todo un personaje!

Esperando un día soleado

Gran canción de " El Jefe" ... Os dejo la traducción:

ESPERANDO UN DÍA SOLEADO

Llueve, pero no he visto ni una nube en el cielo:

Debe ser una lágrima caída de tus ojos

Todo va a salir bien

Me pareció notar la dulce brisa del verano:

tal vez es que suspiras

No te preocupes, vamos a encontrar el camino

Esperando, esperando un día soleado

Disiparé las nubes

Esperando un día soleado

Sin tí, estoy liado con la lluvia que cae

Soy casi una fiesta en una ciudad de un solo perro

Te necesito para apartar la tristeza

Sin tí, soy una chica batería que ha perdido el compás

Soy un carro de helados en una calle desierta

Espero que esta vez vengas para quedarte

Esperando, esperando un día soleado

Disiparé las nubes

Esperando un día soleado

Son tiempos duros, nena, y lo son para todos

Eso es tan cierto como el tic-tac del reloj en la pared

Tan seguro como que la noche se volverá el día

Tu sonrisa, muchacha, llena de luz mis ojos

La tristeza se irá en cuando yo este en pie

Espero que esta vez vengas para quedarte

Esperando, esperando un día soleado

Disiparé las nubes

Esperando un día soleado

Nunca te acostarás...

...sin saber algo nuevo...

Y es que un día en el que no has aprendido nada, es un día perdido.

El amor y la locura



Sé que este cuento es bastante conocido, pero por si todavía queda alguien despistado que no lo haya leído nunca... Además, quería que formara parte de este pequeño trocito de mi mundo que es este blog:

Cuentan que una vez, hace mucho tiempo, se reunieron todos los sentimientos y cualidades del hombre. Cuando el ABURRIMIENTO había bostezado por tercera vez, la LOCURA, como siempre tan loca, les propuso:
- ¡Vamos a jugar al escondite!
La INTRIGA levantó la ceja intrigada y la CURIOSIDAD, sin poder contenerse preguntó:
- ¿Al escondite?... ¿y cómo es eso?

- Es un juego -explicó la LOCURA- en que yo me tapo la cara y comienzo a contar uno hasta un millón mientras ustedes se esconden y cuando yo haya terminado de contar, el primero de ustedes que yo encuentre ocupará mi lugar para continuar el juego.
El ENTUSIASMO bailó secundado por la EUFORIA, la ALEGRÍA dió tantos saltos que terminó por convencer a la DUDA, e incluso a la APATÍA, a la que nunca le interesaba nada. Pero no todos quisieron participar... la VERDAD prefirió no esconderse, ¿para qué? si al final siempre la hallaban, la SOBERBIA opinó que era un juego muy tonto (en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido de ella) y la COBARDÍA prefirió no arriesgarse...
- Uno, dos, tres... -comenzó a contar la LOCURA.
La primera en esconderse fue la PEREZA, que como siempre se dejó caer tras la primera piedra del camino, la FE subió al cielo y la ENVIDIA se escondió tras la sombra del TRIUNFO que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol más alto. La GENEROSIDAD casi no alcanzaba a esconderse, cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos...¿Que si un lago cristalino?, ideal para la BELLEZA. ¿Que si la hendija de un árbol?, perfecto para la TIMIDEZ. ¿Que si el vuelo de la mariposa?, lo mejor para la VOLUPTUOSIDAD. ¿Que si una ráfaga de viento?, magnífico para la LIBERTAD... Así, la GENEROSIDAD terminó por ocultarse en un rayito de sol. El EGOÍSMO en cambio, encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado, cómodo... pero sólo para él. La MENTIRA se escondió en el fondo de los océanos, y la PASIÓN y el DESEO en el centro de los volcanes. El OLVIDO... se me olvidó dónde se escondió... pero eso no es lo importante.
Cuando la LOCURA contaba 999.999, el AMOR aún no había encontrado sitio para esconderse, pues todo se encontraba ocupado... hasta que divisó un rosal... y enternecido decidió esconderse entre sus flores.
- ¡¡¡Un millón!!!- contó la LOCURA y comenzó a buscar.
La primera en aparecer fue la PEREZA, sólo a tres pasos de una piedra. Después se escuchó la FE discutiendo con Dios en el cielo sobre Zoología... A la PASION y el DESEO los sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró la ENVIDIA y, claro, pudo deducir dónde estaba el TRIUNFO. El EGOÍSMO no tuvo ni que buscarlo. Él solito salió disparado de su escondite que había resultado ser un nido de avispas.De tanto caminar sintió sed y al acercarse al lago descubrió a la BELLEZA y con la DUDA resultó más fácil todavía, pues la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún de que lado esconderse...
Así fue encontrando a todos... al TALENTO entre la hierba fresca, a laANGUSTIA en una oscura cueva, a la MENTIRA detrás del arcoiris... (mentira, si ella estaba en el fondo del océano) y hasta al OLVIDO... que ya se le había olvidado que estaba jugando al escondite... pero sólo el AMOR no aparecía por ningún sitio.
La LOCURA buscó detrás de cada árbol, bajo cada arroyuelo del planeta, en la cima de las montañas... y cuando estaba dándose por vencida divisó un rosal y las rosas... Tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas, cuando de pronto un doloroso grito se escuchó... Las espinas habían herido en los ojos al AMOR; la LOCURA no sabía qué hacer para disculparse...lloró, rogó, imploró, pidió perdón y hasta prometió ser su lazarillo. Y desde entonces; desde que por primera vez se jugó al escondite en la Tierra:
EL AMOR ES CIEGO Y LA LOCURA SIEMPRE LO ACOMPAÑA
.

Las 3 rejas


El joven discípulo de un filósofo sabio lo visita y le dice:
- Maestro, un amigo tuyo estuvo hablando de tí con malevolencia.
- ¡Espera!- lo interrumpe el filósofo.-¿Ya hiciste pasar por las tres rejas lo que vas a contarme?
- ¿Las tres rejas?
- Si. La primera es la VERDAD. ¿Estás seguro de que lo que querés decirme es absolutamente cierto?
- No. Lo oí comentar a unos vecinos.
- Al menos lo habrás hecho pasar por le segunda reja, que es la BONDAD. ¿Es bueno para alguien lo que me vas a decir?
- No. en realidad no. Al contrario ...
- La última reja es la NECESIDAD ¿Es necesario hacerme saber lo que tanto te inquieta?
- A decir verdad, no.
- Entonces, dijo el sabio sonriendo, si no es VERDADERO, ni BUENO, ni NECESARIO, sepultémoslo en el olvido.


Anónimo

Cuentos de ayer para niños de hoy

¿ A quién no le gustaba de pequeño que le contaran un cuento?.
Seguro que si hubiéramos vivido unos siglos antes, los momentos en los que los mayores nos contaban un cuento no serían recordados con tanto cariño... Los cuentos para niños no siempre han sido tan dulces y felices como los que hemos escuchado nosotros. Cuentos como La Cenicienta, Blancanieves, La Bella Durmiente... en sus versiones originales, serían clasificados como para mayores de 18 en nuestros días( sexo, violencia, canibalismo, tortura...) .
Más adelante, estos cuentos de tradición oral, fueron "escritos" y suavizados para adaptarse a una sociedad cada vez más sensible, por autores como Andersen, Perrault o los hermanos Grimm ( aunque estos autores también tienen algún que otro cuento que se las trae... y si no leed "El Enebro"de los hermanos Grimm, donde un niño es decapitado por su madrastra y luego se lo sirve estofado a su padre que se lo come sin saber que se trata de su hijo).
Aquí os dejo algunos ejemplos y versiones ( algunos cuentos tienen más de una ya que cada lugar los adaptaba a su propia cultura):

La Cenicienta: De este cuento ( atribuído a Perrault) se cree que existen más de 450 versiones, datando las más antiguas de la época del Antiguo Egipto.
Según una versión, la "adorable" Cenicienta, asesina a su primera madrastra para que su padre se case con el ama de llaves. Con lo que Cenicienta no contaba es que su nueva madrastra se traería para casa a sus 6 hijas... con el trabajo extra que eso conllevaba.
También hay una versión que dice que cuando el príncipe viene a casa de Cenicienta a probar el zapato de cristal a las hermanastras, éstas se cortan los dedos de los pies y los talones para que entre el zapato. Pero el engaño es descubierto ( la sangre se nota mucho y más en un zapato de cristal) y son castigadas haciendo que un cuervo les arranque los ojos.

La Bella Durmiente: En la versión original de este cuento, la bella durmiente no es despertada por un beso del príncipe. Cuando el Rey ( en la versión original tenía más categoría, ya véis) llega y la encuentra dormida, abusa de ella y se marcha. Ella queda embarazada de gemelos, que cuando nacen consiguen llegar hasta el pecho de su madre y empiezan a mamar, lo que hace que ella despierte.
El Rey vuelve y la encuentra despierta y con sus hijos y decide llevarla a palacio... con su mujer. La mujer, celosa, ordena matarla a ella y a sus hijos, ordenando al mayordomo que se los cocine para comérselos. Pero el Rey no lo permite y es ella la que muere. Al final, la bella durmiente se casa con el hombre que la violó...

Blancanieves: Normalmente, no se cuenta el final completo de este cuento. El príncipe se casa con Blancanieves, y le hace un regalo de bodas muy especial: lleva a la madrastra al baile nupcial y la obliga a bailar con unos zapatos de hierro al rojo vivo hasta que cae muerta.

La Sirenita: En el cuento original, la protagonista sólo puede salir a tierra para estar con el apuesto príncipe si bebe una poción que la hace sentir un dolor tan insoportable como si caminara sobre cuchillos todo el tiempo. Pero el príncipe en realidad está enamorado de otra y se acaba casando con ella. La bruja del mar le da un cuchillo y le dice a la sirenita que si quiere recuperar su vida, debe matar al príncipe y si no se transformará en espuma de mar. Ella va al camarote donde el príncipe descansa con su mujer (era su noche de bodas) pero no es capaz de matarlo, y ella muere convertida en espuma.

Caperucita Roja: Igualmente, de este cuento existen numerosas versiones. En alguna de ellas, el lobo hace beber a Caperucita la sangre de su abuela, a la que previamente había matado. En otras, insiste en invitarla a que se meta en la cama con él... Se cree que esta versión iba dedicada a las jovencitas y que el lobo representaba a los hombres... pretendía enseñarlas a resistir la "tentación". En la mayoría de las versiones, Caperucita acaba siendo devorada al igual que su abuelita, aunque en algunas consigue escapar con astucia.

La bella y la bestia: Al final de la versión original de este cuento, las hermanas de Bella ( que no se ofrecieron para salvar a su padre de la Bestia, dejando a su hermana marchar sin reparo), son transformadas en estatuas, pero sin perder la consciencia, para que sean testigos de la felicidad de su hermana.

Menos mal que llegó Walt Disney y nos hizo estas historias menos macabras para procurarnos infancias más felices... aunque eso sí, lo de la madre de Bambi no se lo perdono...



Yo no soy yo misma...

La Oruga y Alicia se estuvieron mirando un rato en silencio: por fin la Oruga se sacó la pipa de la boca, y se dirigió a la niña en voz lánguida y adormilada.
-¿Quién eres tú? -dijo la Oruga.
No era una forma demasiado alentadora de empezar una conversación. Alicia contestó un poco intimidada:
-Apenas sé, señora, lo que soy en este momento... Sí sé quién era al levantarme esta mañana, pero creo que he cambiado varias veces desde entonces.
-¿Qué quieres decir con eso? -preguntó la Oruga con severidad-. ¡A ver si te aclaras contigo misma!
-Temo que no puedo aclarar nada conmigo misma, señora -dijo Alicia-, porque yo no soy yo misma, ya lo ve.

"Alicia en el País de las Maravillas". Lewis Carroll.

Un niño

Una vez el pequeño niño fue a la escuela. Era muy pequeñito y la escuela muy grande. Pero cuando el pequeño niño descubrió que podía ir a su clase con sólo entrar por la puerta del frente, se sintió feliz.
Una mañana, estando el pequeño niño en la escuela, su maestra dijo:
-Hoy vamos a hacer un dibujo.
- Qué bueno- pensó el niño, a él le gustaba mucho dibujar, él podía hacer muchas cosas: leones y tigres, gallinas y vacas, trenes y botes. Sacó su caja de colores y comenzó a dibujar.
Pero la maestra dijo:
- Esperen, no es hora de empezar- y ella esperó a que todos estuvieran preparados. Ahora- dijo la maestra- vamos a dibujar flores.
-¡Qué bueno! - pensó el niño, me gusta mucho dibujar flores, y empezó a dibujar preciosas flores con sus colores.
Pero la maestra dijo:
- Esperen, yo les enseñaré cómo- y dibujó una flor roja con un tallo verde. El pequeño miró la flor de la maestra y después miró la suya, a él le gustaba más su flor que la de la maestra, pero no dijo nada y comenzó a dibujar una flor roja con un tallo verde igual a la de su maestra.
Otro día cuando el pequeño niño entraba a su clase, la maestra dijo: Hoy vamos a hacer algo con barro.
-¡Qué bueno!- pensó el niño, me gusta mucho el barro. Él podía hacer muchas cosas con el barro: serpientes y elefantes, ratones y muñecos, camiones y carros y comenzó a estirar su bola de barro.
Pero la maestra dijo:
- Esperen, no es hora de comenzar - y luego esperó a que todos estuvieran preparados. -Ahora, dijo la maestra, vamos a hacer un plato.
-¡Qué bueno! pensó el niño. A mí me gusta mucho hacer platos y comenzó a construir platos de distintas formas y tamaños.
Pero la maestra dijo:
-Esperen, yo les enseñaré cómo- y ella les enseñó a todos cómo hacer un profundo plato. -Aquí tienen-dijo la maestra- ahora pueden comenzar.
El pequeño niño miró el plato de la maestra y después miró el suyo. A él le gustaba más su plato, pero no dijo nada y comenzó a hacer uno igual al de su maestra.
Y muy pronto el pequeño niño aprendió a esperar y mirar, a hacer cosas iguales a las de su maestra y dejó de hacer cosas que surgían de sus propias ideas.
Ocurrió que un día, su familia, se mudó a otra casa y el pequeño comenzó a ir a otra escuela. En su primer día de clase, la maestra dijo:
-Hoy vamos a hacer un dibujo.
-Qué bueno- pensó el pequeño niño y esperó que la maestra le dijera qué hacer.
Pero la maestra no dijo nada, sólo caminaba dentro del salón. Cuando llegó hasta el pequeño niño ella dijo:
-¿No quieres empezar tu dibujo?
- Sí- dijo el pequeño ¿qué vamos a hacer?
- No sé hasta que tú no lo hagas, dijo la maestra.
-¿Y cómo lo hago? - preguntó.
- Como tú quieras contestó.
- ¿Y de cualquier color?
-De cualquier color -dijo la maestra.- Si todos hacemos el mismo dibujo y usamos los mismos colores, ¿cómo voy a saber cuál es cuál y quién lo hizo?
- Yo no sé- dijo el pequeño niño, y comenzó a dibujar una flor roja con el tallo verde.

Helen Buckley