¡ Muchas gracias!


Muchísimas gracias a Campanilla por pasarme este Tag. Me ha hecho muchísima ilusión que te hayas acordado de la única habitante de mi olvidado País de las Maravillas. No dejéis de pasar por su blog, que realmente vale la pena. Ahora, cumplamos con el protocolo:

1- Enlazar con el blog que te lo ha otorgado. ( Hecho).
2- Publicar las reglas. ( Hecho)
3- Escribir 7 cosas sobre tí. ( Vamos allá)

- Mi encanta la enseñanza. Es curioso como algunas de las cosas que marcarán tu vida se descubren por casualidad... ( si es que creéis en las casualidades...)
- Me como mucho el coco...
- Me encanta la música. No podría vivir sin ella. ¿ Qué escucho? Casi de todo... desde metal a música clásica, pasando por pop, new age, bandas sonoras... ¿ Reggeaton? No, gracias...
- Me encanta leer.
- Soy muy buena escuchando a la gente y guardando secretos.
- Llevo toda mi vida estudiando. Siempre nos queda algo que aprender.
- Me gusta la gente original y diferente.

4- Pasarlo a 6 personas. Bien, pues se lo paso a:

Beatriz ( Más allá del arcoiris)
Amambay ( In the sky with diamonds)
Asunción ( Medusa The Dollmaker)
Bastet ( La cueva de la bruja)
Sole ( Kitty Cat Cult)
Hedda ( Maravilloso mundo de Oz)

Espero que os haga tanta ilusión como a mí.

Buscar otra perspectiva

" Deben luchar por encontrar su propia voz, y cuanto más tarden en empezar tienen menos probabilidades de encontrarla.

Thoreau dijo: Muchos hombres viven en una silenciosa desesperación.

No se resignen a eso. ¡Escapen!"

Lo esencial es invisible para los ojos



—Por favor... domestícame —le dijo.
—Bien quisiera —le respondió El Principito pero no tengo mucho tiempo. He de buscar amigos y
conocer muchas cosas.
—Sólo se conocen bien las cosas que se domestican —dijo el zorro—. Los hombres ya no tienen
tiempo de conocer nada. Lo compran todo hecho en las tiendas. Y como no hay tiendas donde vendan
amigos, los hombres no tienen ya amigos. ¡Si quieres un amigo, domestícame!
—¿Qué debo hacer? —preguntó El Principito.
—Debes tener mucha paciencia —respondió el zorro—. Te sentarás al principio un poco lejos de
mí, así, en el suelo; yo te miraré con el rabillo del ojo y tú no me dirás nada. El lenguaje es fuente de
malos entendidos. Pero cada día podrás sentarte un poco más cerca...


[...]


—Vete a ver las rosas; comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme
adiós y yo te regalaré un secreto.
El Principito se fue a ver las rosas a las que dijo:
—No son nada, ni en nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ustedes han
domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros.
Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo.


[...]


—Adiós —dijo el zorro—. He aquí mi secreto, que no puede ser más simple : sólo con el corazón
se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos.



El Principito. Antoine Saint- Exupéry